El mouse es uno de los accesorios indispensables durante la operación diaria de la computadora. Su funcionamiento normal se altera con frecuencia debido a los residuos de polvo y otras sustancias que se acumulan en sus diferentes partes, especialmente las móviles.
Para realizar el mantenimiento preventivo se requiere de las siguientes herramientas: un juego de atornilla dores (de estrella, de pala, hexagonal y de copa), alcohol isopropílico, copitos de algodón, una brocha pequeña de cerdas suaves y recipiente para colocar tornillos.
Para empezar se debe desconectar el mouse de la computadora, tener una mesa limpia y seca para realizar la limpieza. Primero se procede a retirar la tapa giratoria del mouse mecánico para poder sacar la esfera que cumple la función de dirección del mouse. Se destornilla y se desarma, se observan los discos correspondientes al desplazamiento del cursor, los cuales se ensucian y forman una capa de sucio que evitan que el sistema de la foto sensor trabaje correctamente. Estos se limpian con un copito de algodón humedecido en alcohol isopropílico. Se recomienda retirar la tarjeta del mouse con mucho cuidado por los lados para no dañarla, en el caso del mouse óptico puede dañar el lente(el cual resulta muy costoso), para limpiar la tapa inferior del mouse con la brocha o con un trapito humedecido en alcohol isopropílico si así se desea.
El mouse óptico es recomendable no abrir ya que su limpieza resulta ser muy delicada y un pequeño error podría dejarlo inservible (solo debe hacerlo un técnico en computadoras).
Una vez culminado el mantenimiento preventivo se procede armar nuevamente el mouse recordando colocar todas las partes en su lugar correctamente.
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